Muchas personas creen que cualquier imperfección de la piel es simplemente acné, pero lo que parece un problema menor puede ser en realidad un indicio de una afección más grave que requiere tratamiento profesional. Este problema es más frecuente de lo que se cree y puede afectar a personas de cualquier edad.
Cuando el acné no es lo que parece
El acné suele causar granos, puntos negros y zonas irritadas en la cara, el pecho y la espalda. Sin embargo, lesiones idénticas pueden ocultar otras afecciones dermatológicas como infecciones, reacciones alérgicas o enfermedades autoinmunes.
En raras ocasiones, un brote que no responde a las terapias habituales puede deberse a rosácea, dermatitis o incluso a algunos tipos de cáncer de piel. Por lo tanto, es fundamental no ignorar ninguna afección cutánea que no mejore o empeore con el tiempo.
Síntomas que deberían alertar
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