Tapa la olla de cocción lenta y déjala a fuego lento durante 2 o 3 horas, o hasta que el arroz esté tierno y el líquido se haya absorbido.
Controla y revuelve de vez en cuando para asegurar una cocción uniforme. Agrega más caldo si el arroz absorbe el líquido demasiado rápido.
Paso 4: Agrega el queso y las proteínas
Una vez que el arroz esté cocido, agrega el queso cheddar rallado, el pollo cocido y cualquier ingrediente opcional como crema o queso parmesano.
Tapa y cocina a fuego lento durante 15 a 20 minutos más hasta que el queso se derrita y todo esté bien caliente.
Paso 5: Sirve y disfruta
Continúa en la página siguiente
Esponja el arroz con un tenedor y sírvelo tibio.
Adorna con queso adicional, hierbas picadas o una pizca de pimienta negra si lo deseas.
Consejos para un arroz perfecto en olla de cocción lenta
Elige el arroz adecuado: Las variedades de grano largo como el jazmín o el basmati funcionan mejor para esta receta. Evita el arroz instantáneo, ya que puede volverse blando.
Personaliza el sabor: experimenta con diferentes caldos, especias o complementos para adaptarlos a tu gusto.
Controla el tiempo de cocción: los tiempos de cocción lenta pueden variar, así que controla el arroz periódicamente para evitar que se cocine demasiado.
Textura más cremosa: para obtener un plato más cremoso, agrega crema o leche después de que el arroz esté cocido.
Por qué funciona esta receta
La olla de cocción lenta garantiza una cocción uniforme, mientras que la combinación de caldo, queso y proteína infunde al arroz sabores ricos y sabrosos. Es una forma infalible de crear una comida reconfortante y satisfactoria con un mínimo esfuerzo.
Variaciones
Opción vegetariana: omite el pollo y usa caldo de verduras. Agrega verduras adicionales como hongos, calabacín o espinaca.
Toque picante: agrega una pizca de hojuelas de pimiento rojo o jalapeños cortados en cubitos para darle un toque picante.
Estilo italiano: usa condimento italiano, queso mozzarella y tomates secados al sol para un plato de inspiración mediterránea.