Cuando llega el verano, no hay nada mejor que disfrutar de un buen helado casero.Es una opción económica, divertida y llena de sabor.
El helado de Tang se convierte en una alternativa rápida y sencilla que no solo refresca, sino que sorprende por su textura cremosa y su intensidad de sabor.
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Además, es ideal para hacer con los chicos o para compartir en una merienda diferente.
A continuación, te explico cómo preparar este delicioso helado casero con ingredientes que seguramente tenés en casa.
No hace falta máquina de helado ni técnicas complicadas, solo un poco de paciencia y ganas de disfrutar.
Ingredientes
1 lata de leche condensada (395 g)
4 cucharadas de azúcar
1 litro de leche entera
3 cucharadas de leche en polvo
1 sobre de jugo Tang del sabor que prefieras (ananá, naranja, frutilla, etc.)
Preparación
En un bol grande, verté la leche condensada y agregá el azúcar y la leche en polvo. Mezclá bien con un batidor de mano o cuchara hasta que todo se integre y no queden grumos.