En 2016, esta abuela viajera comenzó su viaje. Renunció a su trabajo como trabajador social en el sistema penitenciario de Kera en Brasil.
El trabajo puede ser muy rutinario y cuando se jubila, Josefa siente cómo liberarse de la carga que ha estado cargando durante años. Cuando la Sra. Vitosa se jubiló, optó firmemente por vender todos sus activos.
Su casa, muebles, ropa y pertenencias fueron vendidas para que pudiera viajar. Hoy, todas sus pertenencias caben en una bolsa.
“Hay tanta vida fuera de la caja que ellos llaman ‘hogar’. No te haces abuela para cuidar a tus nietos. Testificó ante la BBC en Brasil. Hasta el momento, la abuela jubilada ha visitado más de 40 países entre Europa, Asia, África y América, y todo eso se puede ver en su perfil de Instagram, donde rastrea sus recuerdos.
Para muchas de las mujeres mayores, Josefa se convirtió en su heroína y la felicitan por su valentía al negarse a ser una herramienta para su familia, como muchas lo hicieron sin consultarlas. Se ha hablado tanto del tema en todo el mundo que los expertos en desarrollo humano lo respaldan.
Asegúrese de que el punto fino sea el equilibrio de su vida personal y la importante tarea de cuidar a sus hijos. Para ellos, respetar a sus mayores es muy importante para su desarrollo integral, por lo que es fundamental respetar sus decisiones.