Mezcle todo bien, pero sin amasarlo demasiado. Forme hamburguesas uniformes, de seis a ocho, según su preferencia. Reserve.
A continuación, calienta una sartén a fuego medio y añade un poco de aceite. Una vez caliente, coloca con cuidado las hamburguesas en ella.
Cocínelas de 4 a 5 minutos por cada lado, o hasta que estén doradas y bien cocidas. Una vez listas, retire las hamburguesas de la sartén y resérvelas en un plato.
En la misma sartén, añade las cebollas y los champiñones picados. Cocina durante unos 4-5 minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que se ablanden y empiecen a dorarse. Esto creará una base sabrosa para tu salsa.
Para preparar la salsa, bata el caldo de res y la mezcla para salsa marrón en un recipiente aparte hasta obtener una mezcla homogénea. Vierta esta mezcla en la sartén con la cebolla y los champiñones.
Ponlo a hervir a fuego medio, removiendo constantemente para evitar grumos. Deja que la salsa se cocine durante unos 5 minutos hasta que espese.
Para un toque extra de sabor, añade el kétchup y la mostaza Dijon si las usas. Le dan un toque sutil y cremoso a la salsa.
Si desea una salsa más espesa, prepare una pasta mezclando la maicena con un poco de agua fría y añádala a la salsa. Remueva y deje cocinar de 2 a 3 minutos más.
Regrese las hamburguesas cocidas a la sartén, cubriendo con la salsa. Reduzca el fuego a bajo y deje que todo hierva a fuego lento durante 5 minutos más.
Las hamburguesas se empapan en la deliciosa salsa. Sírvelas calientes, añadiéndoles un poco de salsa extra por encima.
Cómo hacer
Comienza preparando la mezcla de carne para las hamburguesas, asegurándote de que los ingredientes estén bien mezclados sin trabajarlos demasiado. Dales forma de hamburguesas del tamaño deseado.
Mientras se cocinan las hamburguesas, prepare la salsa. La clave está en potenciar los sabores cocinando la cebolla y los champiñones en la misma sartén.
Luego, se agrega la mezcla de caldo y se deja espesar con maicena. Este método ayuda a que todos los sabores se integren.
Una vez cocidas las hamburguesas, déjalas reposar mientras preparas la salsa para que el sabor se intensifique. Añadir kétchup y mostaza Dijon (opcionales) es una excelente manera de realzar el plato.
Ofrece un ligero dulzor y un toque ácido. La maicena espesa la salsa hasta lograr la consistencia perfecta, y las hamburguesas terminan de absorber el sabor de la salsa.
La belleza de este plato reside en su sencillez y flexibilidad. No hace falta ser un chef experto para prepararlo.
Pero parecerá que has pasado horas preparándola. Esta receta también queda deliciosa con puré de papas, arroz o incluso una buena hogaza de pan para absorber toda la salsa.
Variaciones
Para una versión más ligera, puedes sustituir la carne de res por pavo o pollo, ajustando el sazón al gusto. Esto hará que la hamburguesa sea más magra y conserve ese delicioso sabor.
Si buscas darle un toque más picante, considera agregar un poco de pimienta de cayena o pimentón ahumado a las hamburguesas para darles un toque extra.
También puedes incorporar hierbas frescas como tomillo o romero a la salsa para darle un toque aromático.
Para una opción vegetariana, sustituye las hamburguesas de carne por hamburguesas de verduras o lentejas. Mientras la salsa siga brillando.
Las abundantes hamburguesas vegetarianas proporcionarán una textura rica que combina perfectamente con la sabrosa salsa.
Para agregar más verduras al plato, puedes incorporar guisantes, zanahorias o judías verdes a la mezcla de salsa.
Estos ingredientes adicionales complementarán el plato y lo harán sentir más robusto y completo.
Otra variante es preparar este plato con diferentes tipos de champiñones. Aunque la receta lleva champiñones laminados.
Siéntete libre de experimentar con hongos cremini, shiitake o portobello para obtener un sabor más rico y terroso.
También puedes preparar la salsa con antelación y guardarla en el refrigerador hasta por tres días para calentarla rápidamente cuando estés listo para servir. Esto te ahorrará mucho tiempo en las noches ajetreadas.
Si buscas darle al plato un toque más indulgente, prueba servirlo sobre cebollas fritas crujientes para lograr una textura crujiente que combina maravillosamente con las suaves hamburguesas y la salsa suave.
Consejos
Al formar las hamburguesas, procura que tengan el mismo tamaño para que se cocinen uniformemente. No las presiones demasiado, ya que esto puede hacer que queden densas en lugar de jugosas.
Para una salsa más suave, asegúrese de batir bien el caldo de res y la mezcla para salsa marrón antes de añadirla a la sartén. Esto evita que se formen grumos durante la cocción.
Para ahorrar tiempo, considere usar champiñones ya cortados y ajo picado. Esto reduce el trabajo de preparación y le permite concentrarse en cocinar las hamburguesas y la salsa.
Si no tienes maicena, puedes sustituirla por harina para espesar la salsa. Solo asegúrate de mezclarla lentamente para evitar grumos.
Pruebe siempre la salsa a medida que la vaya preparando. Si le falta sabor, puede añadir un chorrito de salsa Worcestershire o una pizca de sal para realzarlo.
Si la salsa queda demasiado espesa, simplemente agregue un poco más de caldo de res hasta que alcance la consistencia deseada.
Para un sabor aún más intenso, prueba usar caldo de res casero en lugar del comprado. Le aportará un sabor intenso y difícil de igualar.
Conclusión
Esta receta es perfecta para cualquiera que desee una comida satisfactoria y sabrosa que no requiera mucho tiempo de preparación.
La combinación de hamburguesas jugosas y salsa rica y sabrosa es un éxito garantizado. Con ingredientes sencillos y pasos sencillos.
Es un plato que incluso los cocineros principiantes pueden preparar y que, aun así, sabe como si viniera de un restaurante de alto nivel.
Ya sea tu primera o tu tercera vez, esta comida nunca te decepcionará. Sus sabores reconfortantes, su fácil preparación y sus infinitas variaciones la convierten en una opción indispensable en cualquier cocina. ¡Que la disfrutes!
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