Preparar la Salsa Boloñesa:
Calienta el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio. Agrega la cebolla y el ajo, y sofríe hasta que estén dorados.
Añade la zanahoria y el pimiento rojo, y cocina durante unos minutos más.
Incorpora la carne molida, y cocina hasta que se dore completamente.
Añade el tomate triturado, la pasta de tomate, el vino tinto, el orégano y la albahaca. Cocina a fuego lento durante unos 30 minutos, removiendo ocasionalmente. Ajusta la sal y la pimienta al gusto.
Preparar la Salsa Bechamel:
En una cacerola, derrite la mantequilla a fuego medio. Añade la harina y cocina durante unos 2 minutos, removiendo constantemente para evitar que se formen grumos.
Poco a poco, añade la leche mientras sigues removiendo para obtener una mezcla suave. Cocina hasta que la salsa espese.
Agrega una pizca de nuez moscada y sal al gusto.
Montar la Lasaña:
Precalienta el horno a 180°C.
En una fuente para horno, coloca una capa de salsa boloñesa, seguida de una capa de láminas de lasaña. Luego, extiende una capa de salsa bechamel.
Repite las capas hasta que se acaben los ingredientes, finalizando con una capa de salsa bechamel.
Espolvorea con queso mozzarella y parmesano.
Hornear:
Hornea la lasaña durante 30-40 minutos, o hasta que esté dorada y burbujeante.
Deja reposar durante unos 10 minutos antes de servir.
Dicas para Lasaña con Dos Salsas
Para obtener una lasaña más jugosa, asegúrate de no escatimar en la salsa boloñesa.
Puedes preparar las salsas con antelación y montar la lasaña justo antes de hornear para facilitar el proceso.
Si usas láminas de lasaña que no necesitan cocción previa, asegúrate de que estén bien cubiertas con salsa para que no queden duras.