Mezcla seca
2 tazas de harina para todo uso (o una mezcla de harina sin gluten 1:1)
1½ cucharadita de polvo para hornear
½ cucharadita de bicarbonato de sodio
½ cucharadita de sal
2 cucharaditas de canela molida
½ cucharadita de nuez moscada (opcional para más calidez)
Mezcla húmeda
½ taza de mantequilla sin sal, ablandada
¾ taza de azúcar granulada
2 huevos grandes (a temperatura ambiente)
1 cucharadita de extracto de vainilla
¾ taza de suero de leche (o ¾ taza de leche mezclada con ¾ cucharada de vinagre blanco, dejar reposar 5 minutos)
Cubierta
½ taza de azúcar granulada
1 cucharada de canela molida
6 cucharadas de mantequilla sin sal, derretida
Instrucciones paso a paso
1. Prepara el horno.
Precalienta el horno a 190 °C (375 °F). Engrasa ligeramente un molde para muffins de 12 tazas o cúbrelo con capacillos de papel. En un tazón grande, bate la harina, el polvo para hornear, el bicarbonato, la sal, la canela y la nuez moscada hasta que esté todo bien mezclado. Reserva.
2. Batir la mantequilla y el azúcar.
En un recipiente aparte, usar una batidora para batir la mantequilla ablandada y el azúcar durante unos 3 a 5 minutos, hasta que la mezcla esté ligera y esponjosa. Agregar los huevos uno a uno, asegurándose de mezclar bien después de cada uno. Luego, incorporar el extracto de vainilla.
3. Combine los ingredientes.
Añada los ingredientes secos y el suero de leche alternadamente a la mezcla de mantequilla en tres tandas, comenzando y terminando con los ingredientes secos. Mezcle suavemente hasta que todos los ingredientes estén integrados. Evite mezclar demasiado para que los muffins queden tiernos.
4. Hornea los muffins.
Divide la masa uniformemente entre los moldes, llenándolos hasta dos tercios de su capacidad. Hornea en el horno precalentado de 15 a 18 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, este salga limpio y la superficie recupere su forma original. Deja enfriar los muffins en el molde durante 5 minutos y luego pásalos a una rejilla para que se enfríen por completo.
5. Cubre con azúcar y canela.
Mientras los muffins aún estén calientes, mezcla la canela y el azúcar en un plato hondo. Pincela cada muffin con mantequilla derretida y luego rebózalos generosamente en la mezcla de azúcar y canela. Para una cobertura aún más crujiente, unta con mantequilla y rebózalos una vez más en la mezcla de azúcar y canela.
Consejos para solucionar problemas .
¿Por qué mis muffins quedan secos?
Es posible que se hayan horneado demasiado tiempo. Vigila el horno y sácalos en cuanto al pincharlos con un palillo, este salga limpio.
¿Por qué mis muffins quedan densos?
Asegúrate de batir bien la mantequilla y el azúcar primero; esto atrapa el aire y ayuda a que los muffins queden ligeros y esponjosos.
¿Por qué no se pega el azúcar con canela a los muffins?
Hay que rebozarlos mientras aún están calientes para que la mantequilla derretida ayude a que el azúcar con canela se adhiera perfectamente.
Variaciones de sabor divertidas.
Variación de sidra de manzana: Sustituya el suero de leche por ½ taza de sidra de manzana y ¼ de taza de leche, luego incorpore ½ taza de manzana recién rallada para una sorpresa afrutada.
Especias de calabaza: Añada ½ taza de puré de calabaza y 1 cucharadita de especias de calabaza a los ingredientes húmedos para un acogedor sabor otoñal.
Cubierta de chocolate: Sumerja el chocolate frío.
tapas de muffins derretidas
Chocolate para un delicioso postre que combina donut y cupcake.
Centro sorpresa: Coloca una cucharada de mermelada o crema de chocolate en el centro de cada muffin antes de hornearlo para una deliciosa sorpresa en su interior.
Sugerencias de presentación
Disfruta de estos
Muffins con una taza de café caliente, té chai o un vaso de leche fría.
Colóquelos en una bandeja de postres para brunchs, baby showers o fiestas informales.
Sírvalos calientes justo después de cubrirlos o hornéelos con antelación y añada la cobertura de azúcar y canela justo antes de servir.
Para mantener los muffins frescos, guarde los que no estén recubiertos en un recipiente hermético a temperatura ambiente hasta por dos días. Añada la cobertura de mantequilla, canela y azúcar justo antes de consumirlos para obtener una textura óptima.
Conclusiones .
Suaves, dulces y recubiertos con una crujiente capa de azúcar y canela, estos muffins de dona con azúcar y canela combinan a la perfección lo mejor de ambos mundos. Hechos con ingredientes básicos de la despensa y un toque de mantequilla, son ideales para desayunos rápidos, repostería de fin de semana o celebraciones informales. Cuando tu cocina se llene del cálido aroma a canela y azúcar, sabrás que has dado en el clavo.
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