Es importante usar leche y agua tibias. Si la leche (o el agua) está fría en el refrigerador, la levadura no funcionará correctamente. Asegúrese de que la temperatura esté entre 40 y 43 °C.
Utilice hierbas frescas en lugar de hierbas secas, esto agregará mejor sabor.
Unte ligeramente el pan horneado con aceite de oliva, pero tenga cuidado de no dejarlo demasiado grasoso.
Cómo conservar el pan de leche turco:
El pan de leche turco se sirve mejor inmediatamente, aún caliente. Las sobras se pueden guardar en un recipiente hermético hasta por 3 días. Recaliente el pan en una sartén seca durante unos minutos por cada lado.
Ingredientes
PARA LA MASA: HARINA
PARA TODO USO
50 gramos LECHE TIBIA 160ml AGUA TIBIA 160ml LEVADURA SECA 7g AZÚCAR 10g SAL 6g ACEITE DE OLIVA 20ml PARA EL RELLENO: MANTEQUILLA FUNDIDA 20g PEREJIL FRESCO PICADO
En un bol, combine la leche tibia con el agua, la levadura seca y el azúcar. Bata hasta integrar.
Incorpore la harina y la sal.
Comienza a mezclar la masa con una espátula. Luego, continúa amasándola con las manos hasta obtener una masa elástica.
Añade el aceite de oliva y amásalo con la masa.
Pincela la parte superior con aceite de oliva, tapa y deja reposar durante 1 hora.
Enrolle la masa hasta formar una bola y divídala en 6 partes.
Enrolle cada trozo hasta formar una bolita pequeña.
Utilice un rodillo para aplanar cada bola hasta formar un círculo.
Calienta una sartén antiadherente a fuego medio-alto. Coloca con cuidado la masa aplanada en la sartén caliente.
Calienta el pan plano durante 1 minuto, hasta que empiecen a formarse burbujas. Voltéalo y cocina por el otro lado durante un minuto más. Voltéalo de nuevo, reduce el fuego a bajo y continúa cocinando la focaccia durante 3-4 minutos, o hasta que se infle. Voltéalo y cocina por el otro lado durante 1-2 minutos.
Unte cada pan con mantequilla derretida. Espolvoree con perejil picado y sirva.