Aquí te contamos cómo puedes usar bicarbonato de sodio para eliminar rayones:
Prepara una pasta de bicarbonato de sodio: mezcla una pequeña cantidad de bicarbonato de sodio con agua para crear una pasta espesa. La proporción debe ser de aproximadamente 1 cucharada de bicarbonato de sodio por 1 cucharada de agua.
Aplica la pasta a los lentes: con un paño suave o una bolita de algodón, aplica la pasta de bicarbonato de sodio a los lentes, frotando suavemente con movimientos circulares sobre las áreas rayadas.
Déjala reposar: deja que la pasta de bicarbonato de sodio repose sobre los lentes durante unos 10 minutos, al igual que con el método de la pasta de dientes.
Enjuaga y seca: enjuaga tus anteojos con agua tibia, asegurándote de que toda la pasta de bicarbonato de sodio se haya eliminado por completo. Seca los lentes con una microfibra o un paño suave y verifica los resultados.
Consejos para evitar rayones futuros
Ahora que tus lentes están libres de rayones, es esencial tomar precauciones para evitar daños mayores. Aquí tienes algunos consejos:
Guarda siempre tus gafas en un estuche: cuando no las uses, guárdalas en un estuche protector para evitar que se rayen por caídas accidentales o por un manejo brusco.
Utiliza un paño de limpieza adecuado: nunca utilices pañuelos de papel, papel higiénico ni tu camisa para limpiar las gafas. En su lugar, utiliza un paño de microfibra diseñado específicamente para limpiar las lentes.
Evita colocar las gafas con las lentes hacia abajo: acostúmbrate a colocar las gafas con las lentes hacia arriba para evitar el contacto con superficies que puedan rayarlas.
Manipúlalas con cuidado: ten cuidado al quitarte o ponerte las gafas y evita jugar con ellas o dejarlas en zonas donde puedan caerse.
Conclusión
Los arañazos en las lentes pueden ser una molestia, pero con la simple aplicación de pasta de dientes o bicarbonato de sodio, puedes restaurar fácilmente tus gafas sin gastar dinero en tratamientos profesionales. Si sigues estos métodos caseros, podrás volver a disfrutar de una visión clara y sin arañazos. Además, adoptar buenos hábitos, como técnicas adecuadas de almacenamiento y limpieza, te ayudará a garantizar que tus lentes se mantengan en excelentes condiciones a largo plazo.