Unir los ingredientes secos y húmedos: Poco a poco, agregue la mezcla de harina a los ingredientes húmedos. Usa tus manos o una espátula para mezclar hasta que obtengas una masa suave y manejable. Si la masa está demasiado pegajosa, puedes agregar un poco más de harina hasta que tenga la consistencia adecuada.
Formar las bolitas y rellenar: Divide la masa en pequeñas bolitas del tamaño de una nuez. Con un rodillo, estira cada bolita en círculos pequeños. En el centro de cada círculo, coloca una cucharadita del relleno. Para hacer el relleno, muele las nueces junto con el requesón, el azúcar, la yema de huevo y la clara de huevo hasta obtener una mezcla cremosa.
Enrollar y hornear: Una vez que el relleno esté en su lugar, enrolla cuidadosamente la masa alrededor del relleno, formando un pequeño cilindro. Asegúrese de que los extremos estén bien sellados para que el relleno no se derrame durante la cocción. Coloque los rollitos en una bandeja para hornear forrada con papel manteca.
Ver continuación en la página siguiente