Comience calentando 400 ml de leche con la ralladura de un limón y una cucharadita de azúcar de vainilla. Hervir agua.
En otro recipiente, mezcle 2 yemas de huevo con 40 g de azúcar y 15 g de maicena. Cocine esta mezcla, revolviendo constantemente, hasta que espese. Luego déjalo enfriar.
Una vez que la mezcla se haya enfriado, agregue el jugo de un limón y 100 g de leche condensada azucarada. Batir bien hasta que la mezcla vuelva a espesar.
Para darle el toque final, decora tu postre con canela, cacao o chocolate, según tu preferencia. Este paso no solo aporta un toque estético sino también un bienvenido contraste de sabores.
Deja reposar tu creación en el frigorífico durante 30 minutos. Este tiempo permite que el postre se reafirme y desarrolle completamente sus aromas.
En otro recipiente, mezcle 2 yemas de huevo con 40 g de azúcar y 15 g de maicena. Cocine esta mezcla, revolviendo constantemente, hasta que espese. Luego déjalo enfriar.
Una vez que la mezcla se haya enfriado, agregue el jugo de un limón y 100 g de leche condensada azucarada. Batir bien hasta que la mezcla vuelva a espesar.
Para darle el toque final, decora tu postre con canela, cacao o chocolate, según tu preferencia. Este paso no solo aporta un toque estético sino también un bienvenido contraste de sabores.
Deja reposar tu creación en el frigorífico durante 30 minutos. Este tiempo permite que el postre se reafirme y desarrolle completamente sus aromas.