Enharina ligeramente la superficie de trabajo y extiende la masa de hojaldre hasta formar un rectángulo de aproximadamente 30 x 25 cm.
Déjala a un lado mientras preparas el relleno.
3. Cocina el relleno
En un bol pequeño, bate los huevos con la leche.
Calienta una sartén antiadherente a fuego medio y revuelve los huevos hasta que estén listos. Retíralos del fuego y deja que se enfríen un poco.
Cocina el tocino hasta que esté crocante y luego desmenúzalo en trozos pequeños.
4. Arma los rollitos
Distribuye los huevos revueltos de manera uniforme sobre la masa de hojaldre, dejando un pequeño borde alrededor de los bordes.
Espolvorea el tocino desmenuzado de manera uniforme sobre los huevos.
Cúbrelos con el queso cheddar rallado para lograr un acabado pegajoso y cremoso.
5. Enrolla y corta
Comenzando por el lado más largo, enrolla firmemente la masa de hojaldre hasta formar un rollo.
Usa un cuchillo afilado para cortar el rollo en rodajas de 2,5 cm de grosor.
Coloca los rollitos de masa sobre la placa para horno preparada, espaciándolos aproximadamente 2 pulgadas entre sí
6. Hornea
Hornea los rollitos de masa en el horno precalentado durante 15 a 20 minutos, o hasta que la masa esté dorada y esponjosa.
7. Sirve
Deja que los rollitos de masa se enfríen durante unos minutos antes de servir. ¡Disfrútalos tibios junto con tus guarniciones favoritas!
Sugerencias para servir
Ensalada de frutas frescas: un complemento ligero y refrescante para los sabrosos rollitos de masa.
Papas asadas: las papas crujientes para el desayuno son una guarnición sustanciosa.
Salsas: combina con una salsa cremosa de aguacate, salsa de tomate picante o salsa holandesa para agregarle sabor.
Consejos para el éxito
No rellenes demasiado: demasiado relleno puede hacer que los rollitos de masa sean difíciles de enrollar o hacer que exploten durante el horneado.
Mantén la masa fría: trabaja rápidamente con la masa de hojaldre para evitar que se caliente demasiado y se pegue.
Rellenos personalizables: experimente con ingredientes como jamón cortado en cubitos, espinaca o champiñones para darle un toque personalizado.
Almacenamiento y recalentamiento
Refrigeración: guarde los rollitos sobrantes en un recipiente hermético en el refrigerador hasta por 3 días.
Recalentamiento: caliéntelos en el horno a 350 °F (175 °C) durante 5 a 7 minutos, o en el microondas durante 30 segundos.
Congelación: congele los rollitos sin hornear en una bandeja y luego transfiéralos a una bolsa para congelador. Hornee congelados, agregando 5 minutos adicionales al tiempo de cocción.
Por qué le encantará esta receta
Rápida y fácil: perfecta para mañanas ajetreadas o brunchs especiales.
Personalizable: adapte los rellenos a las preferencias de su familia.
Reconfortante y delicioso: combina todos sus sabores de desayuno favoritos en un bocado sabroso y escamoso.
Disfrute de estos rollitos de tocino, huevo y queso al horno como una deliciosa pieza central para su tradición de desayuno dominical. ¡Seguro que traerán sonrisas a la mesa en todo momento!