A medida que envejecemos, nuestra piel se vuelve más delicada, nuestro sistema inmunitario cambia y las defensas naturales de nuestro cuerpo pueden debilitarse. Una buena higiene personal no solo se trata de lucir limpia, sino también de proteger la salud, prevenir infecciones y sentirse segura de sí misma.
Si bien la mayoría de las personas se centran en zonas obvias como el rostro, las axilas y los pies, hay algunas partes del cuerpo que a menudo se pasan por alto. Descuidarlas puede causar olores desagradables, irritación de la piel e incluso problemas de salud.
A continuación, se presentan cinco zonas a las que debe prestar especial atención después de los 60 años para mantener su cuerpo fresco, sano y lleno de energía.
1. Detrás de las orejas y a lo largo de la línea del cabello
El sudor, los aceites naturales y los productos capilares pueden acumularse detrás de las orejas y a lo largo de la línea del cabello, lo que provoca mal olor e irritación de la piel. Lave suavemente estas zonas con agua tibia y jabón suave cada vez que se bañe.